«Editar era, por decirlo así, una determinación política con frecuencia arriesgada. Esa cualidad de formar parte de la “resistencia” se ha perdido en la pseudotransición, que sigue hasta ahora sin aportar nada significativo ni a nuestra sociedad ni a nuestra cultura.»
Hugo Duarte, «La condición editorial», 2002.
La del cuento «Lucha hasta el amanecer», de Augusto Roa Bastos (1917-2005), si damos credibilidad a las declaraciones de su autor, es una de las historias creativas más interesantes de la narrativa latinoamericana del siglo XX (lo que no es decir poco).
Cuando se publicó por primera vez en el número de enero-marzo de 1978 de la revista fundada en Xalapa por el profesor uruguayo Jorge Ruffinelli Texto Crítico (pp. 3-8), lo precedía un texto explicativo fechado en Toulouse en 1978 en el que el autor explicaba su origen remoto:
Este cuento, el primero que escribí, quedó perdido y olvidado durante más de una treintena de años. Durante esos años de amnesia, de seguro no inocente, dudé incluso que lo hubiese escrito alguna vez. Llegué a pensar que el tal cuento no fuese más que una nebulosa de proyecto literario […]
Cuando hacia 1968 comencé a compilar Yo El Supremo, encontré el cuento esfumado entre las páginas del Tratado de la pintura, de Leonardo da Vinci, libro que yo aprecio particularmente y que me enseñó a ver el sentido del mundo como un vasto jeroglífico en movimiento pero cuyos signos son tal vez indescifrables.
La publicación en esta revista se presenta, pues, como la reconstrucción de un «manuscrito roto, casi ilegible y al que le faltaban dos páginas» escrito cuando el autor contaba unos trece años, pero que Paco Tovar describió como «verdadero núcleo generador del proceder literario roabastiano y piedra de toque en donde confluyen la biografía, las reflexiones y los sueños del autor, a la luz de la violencia y de la muerte».
Un poco después se publicó este trascendental relato en el número 33 de la revista francesa Caravelle, con el mismo texto introductorio, pero su primera edición en forma de libro es la que estrena la ambiciosa colección Linterna, creada en el seno de la editorial paraguaya Arte Nuevo.
La editorial Arte Nuevo fue creada en Asunción a partir de la imprenta homónima por Hugo Duarte Manzoni (1956-2013), nieto de José María Duarte, quien a su vez a principios del siglo xx había sido el impulsor de la Imprenta y Librería La Mundial (que publicó por ejemplo Nuestra epopeya, de Juan Emiliano O’Leary, en 1919). Retrospectivamente, la reputada guitarrista Berta Rojas recordaba la escrupulosidad y esmero del joven Duarte como impresor:
Hugo era mi «imprentero». El director de la imprenta Arte Nuevo donde imprimí casi todos mis programas de conciertos, afiches, folletería a lo largo de mi vida artística. Pronto en mi carrera, Hugo me enseñó que con la calidad no se transa, que cuando alguien toma en sus manos un producto impreso con tu nombre, el papel tiene que ser de la mejor calidad porque se tiene que «sentir» el profesionalismo ya desde el tacto.
Por su parte, el propio protagonista dejó por escrito los motivos que le llevaron a emprender la aventura de convertirse en editor de libros en un mercado difícil como el paraguayo:
Como hombre de imprenta tenía la ventaja de contar con mi propia impresión, y todo empezó como un intento de ver convertidos en libros algunos textos que me interesaban, además de mis propios títulos. Entonces como ahora, yo no tenía demasiadas expectativas de que la cultura, en el Paraguay, pudiera ser un buen negocio. Sin embargo, creí que podría autosustentarse; y que, a largo plazo, un movimiento editorial iría creando su propio público, cosa que, evidentemente, no ocurrió.
Más allá de algunas revistas, folletos, impresos menores y de la colección Estudios Folklóricos Paraguayos (que se estrena con Angu’a Pararä y Estacioneros, de José Antonio Gómez-Perasso y Luis Szaran), Arte Nuevo se da a conocer pues con ese importante librito de Roa Bastos, con diseño de cubierta de Gerardo Escobar e ilustraciones de Jorge Aymar, de cuarenta y cinco páginas y del que, según consta en el colofón, el 26 de septiembre de 1979 se terminaron de imprimir en los talleres gráficos Arte Nuevo los mil quinientos ejemplares de los que constó la edición (y que fue la cifra habitual de los libros publicados por esta editorial).
Más adelante llegaría la recopilación de textos memorialísticos de Juan Rivarola Matto (1933-1991) La belle époque y otras hadas (1980), y progresivamente se crearía una identidad de editorial con vocación literaria pero también muy comprometida con la historia (con la creación de una serie específica) y la no ficción. El propio impresor-editor es uno de los autores de Rasmudel o el relato de tres relatos (1983), con el poeta, actor y dramaturgo Moncho Azuaga (Ramón Sosa Azuaga, n. 1952) y el ya mencionado Jorge Aymar, con ilustraciones de Ramón Rojas Veia (n. 1956).
Entre los libros de carácter no ficticio publicados por Arte Nuevo en los primeros años de su andadura destacan, por su singularidad, el breve ensayo del profesor de la Universidad Estatal de Texas Charles L. Carlisle La mujer en la ficción de Ana Iris Chaves de Ferreiro (1982), acaso el primer ensayo importante acerca de la obra de una de las mujeres más importantes en la vida intelectual paraguaya de su tiempo, y, por el renombre de su autora y la influencia cultural que ejerció, el estudio histórico de la exiliada española Josefina Pla (1903-1999) Los británicos en el Paraguay 1850-1870 (1984).
De 1985 es la publicación de una obra ambiciosa y que según Hugo Duarte «llevaba veintinueve años esperando editor», la Enciclopedia guaraní-castellano de Ciencias Naturales y conocimientos paraguayos (1985), del doctor Carlos Gatti, quien hacía con esta obra una contribución decisiva para preservar un rico acervo lingüístico y cultural en peligro de extinción.
Del año siguiente es el poemario De Gua’u. La gente no cambia, de Jorge Canese (n. 1947), a quien durante la dictadura de Stroessner habían censurado y secuestrado la primera edición del poemario Paloma blanca, paloma negra (publicado en 1982 por la editorial Botella del Mar del exiliado español Arturo Cuadrado).
Al año siguiente aparecen tanto el poemario de Óscar Ferreriro El gallo de la alquería y otros compuestos y la novela del mencionado Rivarola Matto La isla sin mar, como la compilación de artículos de Hugo Rodríguez Alcalá (1917-2007) La incógnita del Paraguay y otros ensayos, libro que, coincidiendo con el regreso del eminente crítico literario a su país natal tras su jubilación, reúne textos divulgados previamente en revistas de diversos países pero inéditos en el Paraguay, donde además apenas habían circulado (y entre los que se cuentan algunos tan interesantes como «Sobre Elio Vittorini y Juan Rulfo: dos viajes en la cuarta dimensión» o «La narrativa paraguaya entre 1960 y 1970», entre otros).
Hugo Duarte aún publicaría otro libro en Arte Nuevo, Drogas en Asunción. Más allá del miedo (1989), undécimo número de la Serie Ensayos y que apareció precedido de un prólogo de Jorge Kanese, y si bien el propio editor reconocía que económicamente el proyecto era inviable debido a su propia incapacidad para generar y hacer crecer su propio público («editar para vender, en dos o tres años, mil ejemplares, era una pérdida de tiempo y dinero», escribió), Arte Nuevo llegó a publicar medio centenar largo de interesantes títulos antes de la muerte de Duarte.

Fuentes:
Liliana M. Brezzo, Andrea Tutté y Ricardo Scavone Yegros, «Notas para una historia del libro y la edición en el Paraguay», publicado en texto en El Nacional en tres partes: 24 de octubre de 2021, 31 de octubre de 2021 y 7 de noviembre de 2021, y disponible también en versión vídeo.
Hugo Duarte Manzoni, «La condición editorial. Un acercamiento a las condiciones culturales y editoriales en el Paraguay en los últimos años del stronismo y los primeros de la transición», América sin nombre, núm. 4 (diciembre de 2002), pp. 23-27.
M. Mar Langa Pizarro, Guido Rodríguez Alcalá en el contexto de la narrativa histórica paraguaya, tesis doctoral presentada en 2001 en la Universidad de Alicante.
José Vicente Peiró Barco y Guido Rodríguez Alcalá, Narradoras paraguayas, Asunción, Expolibro, 1999.
s.f., «Hugo Duarte Manzoni deja huellas de cultura y amistad», Última hora, 22 de enero de 2013.
Paco Tovar, «”Lucha hasta el alba”, de Augusto Roa Bastos. Fábula restaurada de un texto recuperado», Scriptura, núm. 1 (1986), pp. 91-96.
Paco Tovar, «Vueltas de memoria: Contravida, de Augusto Roa Bastos», Anales de Literatura Hispanoamericana, núm. 28 (1999), pp. 1223-1235.