A principios del siglo XXI se publicó la traducción al español de uno de los libros infantiles antisemitas más famosos, Der Giftpilz (La seta venenosa), de Ernst Hiemer (1900-1974) e ilustrado por Philipp Rupprecht (1900-1975), conocidos ambos por sus participación en la revista igualmente antisemita, anticomunista, pornográfica y pronazi Der Stürmer (1923-1945). Esta colección de diecisiete cuentos apareció originalmente en 1938 con pie editorial de Julius Streicher, veterano de la primera guerra mundial, miembro desde 1919 de la Deutschvölkischer un Trutzbund (Federación Nacionalista Alemana de Protección y Defensa) y propietario y fundador de Der Stürmer. No hará falta añadir que Der Strümer, si bien siempre se mantuvo en manos de Streicher y no fue nunca una publicación oficial del Partido Nazi, vivió su época dorada con el ascenso al poder de Hitler, cuando pasó de unas tiradas de 2.000 o 3.000 ejemplares en los años veinte a los 600.000 que imprimía entre 1933 y 1940.
Der Giftpilz no es el primer libro infantil antisemita, pero muy probablemente sí es el más famoso y el más traducido a otras lenguas, gracias sobre todo a su uso como libro escolar, a que en 1938 la londinense organización de los años treinta Friends of Europe lo tradujo al inglés y, ya en el siglo XXI, a la iniciativa del neonazi estadounidense Gary Lauck (n. 1953), quien financió la traducción y publicación en diversas lenguas, amparándose en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos.
Poco menos conocido es Trau keinem Fuchs grüner Heid Und keinem Jud bei seinem Eid! («No confíes en un zorro entre el breza verde ni en el juramento de un judío»), de la maestra, escritora e ilustradora Elvira Bauer (1915-¿?), quien antes de lograr publicarlo en 1936 en la colección de libros ilustrados de Stürmer Verlag, vio como se lo rechazaban editoriales en principio tan idóneas como Eher Verlag (editorial oficial del Partido Nazi y boyante sobre todo gracias a la publicación del Mein Kampf de Adolf Hitler). En poco tiempo se hicieron por lo menos siete ediciones, lo que supone un total, como mínimo, de cien mil ejemplares, y la efectividad de sus imaginativas y avanzadas ilustraciones y decoraciones fue reconocida incluso por personajes tan poco sospechosos como Erika Mann (1905-1969), la hija de Thomas. El hecho de emplearse también en centros escolares –no se olvide que el 97% de los maestros pertenecía al sindicato nacionalsocialista– explica en buena medida su amplísima difusión.
De 1940 es Der Pudelmopsdackelpinscher, también del ya mencionado Hiemer y vinculado al editor Julius Streicher (en este caso en Stürm Buchverlag) y en el que cada capítulo establece un paralelismo entre los judíos y un animal distinto (perro, víbora, el piojo…), también destinado al público infantil pero del que incluso una publicación tan afín como Der Hoheitsträger, órgano oficial del Partido Nazi, consideraba excesivamente fuerte. Antes de ser juzgado al final de la segunda guerra mundial e internado en el campo de prisioneros Stalag XIII-D, en el norte de Baviera, durante tres años, Hiemer, colaborador de Der Stürmer desde los años veinte, publicó un tercer libro, pero en este caso destinado al público adulto: una amplísima antología de proverbios y aforismos antisemitas (Der Jude im Sprichwort del Völker, 1942).
Más allá de la actividad editorial de Streicher, la edición propiamente nazi mantuvo a todo lo largo de los años treinta y buena parte de los cuarenta un ritmo de actividad tremendo en el que destacan sobre todo Ullstein Verlag y, por supuesto, Franz Eher Nachfolger.
El origen de la primera –hoy propiedad de Random House– se remonta a finales del siglo XIX, cuando en 1877 el empresario judío Leopold Ullstein (1826-1899) compró a Rudolf Mosse un periódico, Berliner Tageblatt, que reconvirtió en Berliner Zeitung y sobre el que fue construyendo un auténtico imperio editorial. A su muerte la empresa pasó a manos de sus hijos (uno de los cuales, Hermann, huyó en 1938 de la Alemania nazi y se estableció en Estados Unidos), quienes en 1933 fueron obligados a una «arianización» forzosa de la empresa y al año siguiente, en una operación en la que desempeñaron un papel crucial las presiones del Deutsche Bank, la familia se vio obligada a vender a Franz Eher Nachfolger la editorial, valorada en unos sesenta millones de marcos alemanes, por seis millones. A partir de ese momento, Ullstein, rebautizada Deutscher Verlag, cambió por completo su línea editorial en lo que probablemente sea uno de los giros más incomprensibles de un catálogo si se desconoce su historia.
Franz Xavier Josef Eher (1851-1918) había fundado su editorial a principios del siglo XX (1901), y a su muerte pasó a manos del fundador de la Sociedad Thule y uno de los precursores del nacionalsocialismo, de nacionalidad turca, Rudolf von Sbottendorf (Adam Alfred Rudolf Glauer, 1875-1945). A través del mentor político de Hitler Anton Dexler (1884-1942) y financiación del fanático anticomunista Franz von Epp (1868-1947), en diciembre de 1920 la editorial fue comprada por el Partido Nazi, y al año siguiente el principal accionista era ya Adolf Hitler (1889-1945). Por su parte, después de publicar Bevor Hitler kam («Antes de Hitler»), donde subrayaba los vínculos entre las ideas de Hitler expuestas en Mein Kampf y el esoterismo, Sbottendorf fue deportado en 1934 y regresó a Turquía (donde murió misteriosamente ahogado en mayo de 1945).
El grueso de las editoriales nazis, y sobre todo las más conocidas e importantes salvo en el caso de Streicher, no fueron tanto de nueva creación como resultado de compras, a menudo más bien oscuras, valiéndose de una indudable posición de fuerza.
Fuentes:
Randall L. Bytwerk, Julius Streicher, Nazi editor of the notorious Anti-semitic Newspaper «Der Stürmer», Nueva York, Cooper Square Press, 2001.
Mary Mills, «Propaganda and Childrens during the Hitler years», Jewish Virtual Library.
Holocaust Encyclopedia en el United States Holocaust Memorial Museum.